El fuego: origen de especies infértiles
El fuego es un elemento presente en muchos ecosistemas y conocido por modelar muchas de las comunidades vegetales y paisajes de todo el mundo. La resiliencia de las comunidades vegetales en ecosistemas mediterráneos implica que una comunidad puede recuperar su estructura y composición después de un incendio a través de la capacidad de rebrotada y germinación de las especies presentes antes del fuego. Este proceso es conocido como el modelo clásico de autosucesión.
El régimen de incendios (extensión, frecuencia, intensidad, estacionalidad) puede influir fuertemente en la regeneración de las especies vegetales, dando como resultado un cambio en la composición de la vegetación. En la cuenca mediterránea, los intensos cambios en los usos del suelo y el aumento del riesgo de fuego causado por el cambio climático han modificado los regímenes de incendios. Por lo tanto, un incremento de su frecuencia puede comprometer la capacidad regenerativa de las plantas y modificar la vegetación.
Este hecho había sido previamente estudiado en situaciones de frecuencia relativamente baja (dos incendios). La novedad de nuestro trabajo es que se ha estudiado el efecto de frecuencias de hasta cinco fuegos consecutivos en un mismo lugar en sólo 30 años en la zona de la cap de Creus.
La novedad del siguiente trabajo es que se ha estudiado el efecto de frecuencias de hasta cinco fuegos consecutivos en un mismo lugar en sólo 30 años en la zona de cap de Creus.
Nuestros resultados apoyan la hipótesis de que elevadas frecuencias de incendios inducen cambios en la composición de especies de la vegetación mediterránea, es decir, que encontramos diferentes especies a las de antes de los incendios. Debido a la disminución de la capacidad regenerativa estas especies arbustivas, el modelo clásico podría no darse bajo regímenes de fuego frecuentes, induciendo a una transformación de las comunidades de plantas. Frecuencias de cinco incendios podrían ser excesivas para especies rebrotadoras como el brezo (Erica arborea), ya que pierden esa capacidad debido al agotamiento del banco de meristemas y las reservas de nutrientes que tienen almacenadas. Este declive presenta su caso extremo en las estepas (Cistus sp.) que desaparecen bajo frecuencias de cuatro y cinco fuegos. En cambio, especies rebrotadores que sí presentan germinación después del fuego, como la aliaga negra (Calicotome spinosa), no se ven afectadas por elevadas frecuencias de incendios. La combinación de las dos estrategias regenerativas podría ayudar a mantener sus poblaciones y permitir la adquisición de dominancia. Finalmente, especies de gramíneas como el listón (Brachypodium retusum) y otras herbáceas toman dominancia en comunidades vegetales bajo elevadas frecuencias de incendios.
Estos cambios implican una transformación de las comunidades vegetales debido a un cambio en la dominancia relativa de los grupos regenerativos y a una simplificación estructural causada por la dominancia de las especies herbáceas. La disminución de la intensidad competitiva con especies no herbáceas después del fuego, y el ciclo de vida más corto que éstas presentan, podría favorecerlas, estableciéndose una retroalimentación positiva entre estrato herbáceo y fuego.
Referencias
Effects of fire frequency on species composition in a Mediterranean shrubland. A. Vilà-Cabrera, S. Saura-Mas & F. Lloret. Écoscience 15(4), 519 - 528 (2008).