UABDivulga - Barcelona recerca i innovació

Las ciudades y los gobiernos locales son actores importantes en la gobernanza global del cambio climático. Sin embargo, los principios y acuerdos de gobernanza específicos que permiten que los planes y políticas climáticas urbanos realicen compromisos con la equidad social y la justicia, siguen estando en gran medida inexplorados.

En este artículo, utilizamos la ciudad de Barcelona (España) como estudio de caso crítico de una práctica emergente de "justicia climática interseccional". Este enfoque sugiere vías alternativas para tender puentes entre la planificación de la adaptación climática, la acción transformadora y la equidad social al abordar las vulnerabilidades interseccionales centrándose en el cuidado y adoptando enfoques basados en el lugar.

En Barcelona, esto se traduce en planes para mejorar la resiliencia al cambio climático que se llevan a cabo junto con esfuerzos para abordar las desigualdades estructurales en el acceso al entorno construido, los servicios sanitarios, la energía, la vivienda y el transporte que sufren las comunidades vulnerables.

Analizamos 33 planes municipales oficiales, declaraciones y compromisos relacionados con la acción climática y la justicia social lanzados desde 2015. Además, realizamos entrevistas con 23 empleados municipales, técnicos y cargos electos que trabajan en diversos aspectos de la planificación y/o la acción climática en Barcelona.

Para evaluar los principios de gobernanza y los acuerdos utilizados en la gobernanza climática, centramos nuestro análisis en dos proyectos climáticos clave en Barcelona: Refugios Climáticos (Refugis Climàtics en catalán) y Superbloques (Superilles), así como en iniciativas municipales para reducir la pobreza energética de manera más amplia.

Nuestro estudio se centró en el periodo comprendido entre 2015 y 2023, marcado por la intensificación de los esfuerzos para crear una ciudad más ecológica, habitable e inclusiva, abordando al mismo tiempo las desigualdades sociales y económicas.

Descubrimos que Barcelona impulsa la acción climática con principios de justicia interseccional a través de cuatro categorías diferentes de tácticas de gobernanza y toma de decisiones:

1) Experimentar con estrategias de planificación innovadoras y disruptivas.

2) Trabajar transversalmente entre agencias y actores para integrar e institucionalizar la acción climática y la justicia de género.

3) Situar el cuidado en el centro de la planificación urbana.

4) Movilizar enfoques basados en el lugar para abordar las vulnerabilidades de los residentes en primera línea.

Estas últimas tácticas pretenden redistribuir los beneficios de las infraestructuras resilientes al clima de forma más justa y mejorar los procesos participativos de forma más significativa. Nuestra investigación describe estas tácticas, ilustrándolas con citas y anécdotas de las entrevistas y los proyectos estudiados.

En definitiva, nuestro estudio imparte lecciones para una gobernanza climática más justa en la ciudad, donde se movilizan diferentes tácticas para abordar las vulnerabilidades socioeconómicas y estructurales que exacerban la experiencia del cambio climático de los residentes más vulnerables. Aunque las tácticas, los mecanismos y los principios identificados en Barcelona pueden no ser completamente generalizables, ofrecen ideas valiosas para otras ciudades o para futuras investigaciones sobre la acción climática con una perspectiva interseccional.